Primer entrenamiento con Mira

Cuando Mira me propuso entrenar juntos, honestamente tuve un poco de miedo. Practico deporte con regularidad, pero estaba seguro de no poder competir con un triatleta como Mira, que se clasificó para el Mundial Xterra.

Me sentí muy reafirmado cuando Mira me dijo que durante el entrenamiento haríamos «nordic walking» por nuestro impresionante bosque de Plzen. Pero me preguntaba cómo una simple caminata podría formar parte de la preparación para un «triatlón».

Me gusta practicar otros deportes además de los que implica un triatlón. Juego al tenis, esquío y hago esquí de fondo y caminatas sobre raquetas de nieve en invierno, y además me gusta la escalada y el patinaje. Me gusta mucho el «nordic walking», sobre todo en otoño e invierno. Me encanta la luz de la mañana, la paz de los senderos y el aire invernal en mi cara.  Para mí, el «nordic walking» no solo es una forma de hacer algo diferente, sino también una alternativa frente a una sesión de entrenamiento de «running». Sustituir el correr por un «nordic walking» intenso resulta muy útil, porque no me tensa tanto las articulaciones. Escuchar a tu cuerpo para prevenir lesiones también es una parte muy importante del entrenamiento.

Beneficios del «nordic walking»

¡La práctica del «nordic walking» conlleva muchísimos beneficios! Contribuye a aumentar la disponibilidad de oxígeno en todo el organismo. Mejora el sistema cardiovascular, a la vez que tonifica los músculos y refuerza los huesos.

El «nordic walking» es un deporte moderado que implica al cuerpo entero. Puede ser practicado por cualquiera, incluso por las personas menos deportistas, para mantenerse en forma y disfrutar de todas las ventajas, tanto físicas como psicológicas, que ofrecen las actividades al aire libre: aumento del bienestar, mejora de la calidad de vida, mayor seguridad, la oportunidad de unirse con la naturaleza y conocer a otras personas, mantener un peso saludable y mejorar la circulación.

Principales beneficios del «nordic walking» para una persona con una extremidad inferior amputada

Algunos de los beneficios del «nordic walking» son especialmente útiles para las personas que tengan prótesis en las extremidades inferiores.

Las tensiones sobre el sistema locomotor se alivian en aproximadamente un 30% en comparación con las caminatas normales, y la carga se equilibra mejor entre los distintos grupos musculares. Esto permite a los usuarios de prótesis de las extremidades inferiores evitar esguinces en músculos y articulaciones, así como el dolor causado por poner un peso excesivo sobre el resto de la extremidad.

Los bastones ayudan a mantener el equilibrio y ofrecen apoyo y seguridad, incluso en terrenos complicados, reduciendo así la probabilidad de caerse.

El «nordic walking» es perfecto para mejorar la fuerza, la resistencia, la movilidad y la postura. La postura es de gran importancia para las personas con amputaciones de las extremidades inferiores, que a veces tienden a distribuir su peso de forma desigual, dando lugar a posturas problemáticas. Además, el «nordic walking» refuerza los distintos grupos musculares de los brazos, las piernas y el tronco que soportan el cuerpo y ayudan a mantener posturas adecuadas y un ritmo más constante.